Almas de nafta

Sucumbidos en la madrugada 
por el Dios del Trueno
mi amigo el perro mira con ojos asustados
y sus orejas flojas preguntan
-¿qué está pasando?-

Observo a través de la ventana...
el cielo paciente continúa alertando
relampaguea durante incontables minutos
todo es ruido y flashes,
la lluvia aún no cae.

Humanos siguen convirtiendo
el paraíso en infierno
a la orden de políticos inmundos
que queman árboles y campos
para criar los cerdos de alguien más.

El karma habla por encima de las nubes
-Está maldita la raza política,
hay sufrimiento garantizado para ellos
y también para sus esclavos votantes-

Si no ha sido suficiente el primer virus
más fuerte será el venidero...
Es que aunque pretendan no verlo
son a penas, fugaces trozos de basura
insertos en la enorme Diosa Tierra.

El agua en forma de gotas por fin golpea la chapa
sólo queda absoluto dolor
en las almas sordas
que se negaban a escuchar
la consciencia verdadera.