Al que robó las rosas de las avenidas de la muerte

Me había mandado todas las cagadas posibles
"más de mil", dijo el contador de pecados
tenía demasiada paja para discutir,
así que no canté ni nada
sólo seguí caminando y me detuve en el final de la fila.

Descubrí al instante que el infierno no tiene puertas
¿Quién va a querer entrar a un lugar sin salida?
no logré ver ni un reloj allí,
mi cabello está largo, corto, blanco, negro
todo a la vez.

Un perro rengo se alista en la fila de espera
llega por fin mi turno
trato de suspirar pero no sale nada
no veo mi nariz ni mis manos
el perro se rasca y me observa.

Mi cabello sigue blanco, negro,
está largo y corto
todo a la vez,
quisiera encontrar
al que robó las rosas de las avenidas de la muerte.

El perro me supera por el lado izquierdo
no existe tal fila
no hay puertas ni ventanas
no existen los turnos
sigo sin ver un reloj
continúo esperando.